El cuidado de la piel y el culto por la belleza es una de las prácticas más antiguas. Si nos remontamos a nuestra historia podemos observar que el pueblo egipcio elaboraba exfoliantes mezclando aceite animal y sal o baños de leche de burra con un efecto exfoliante gracias a su ácido láctico .
La exfoliación facial debería ser una rutina en todas aquellas personas que se preocupan por la salud de la piel. Los beneficios son innumerables: permite la oxigenación de la piel, elimina las células muertas, la piel gana en brillo, luce más tersa y además disminuye la apariencia de cansancio.
Además, una buena exfoliación con productos naturales proporcionará a nuestra piel nutrientes saludables. En Onix queremos ofrecerte un remedio casero para exfoliar tu piel de forma económica.
1. Exfoliante casero con azúcar
El azúcar es uno de los remedios más económicos y eficaces y puede ser la base de muchos exfoliantes naturales. El aceite de oliva, el limón, la vainilla o el aceite de coco son sólo algunos de los perfectos acompañantes para este tipo de exfoliante.
– Azúcar y limón
Necesitarás una cucharada de azúcar y el jugo de una rodaja de limón. Reparte la mezcla en tu rostro y enjuaga con agua fresca.
– Azúcar y aceite de oliva
Vierte en tu mano un poco de aceite de oliva y espárcelo en tu cara. Tras frotar durante 30 segundos, enjuágate la cara con agua caliente para quitar todo el azúcar. Todavía tendrás aceite en la cara, así que elimínalo con un paño.
En Onix esperamos que estos consejos sobre cómo hacer tu propio exfoliante casero te hayan servido de ayuda para cuidar tu piel y lucir un mejor cutis.
Recordamos que esto son sólo consejos, y que ante cualquier problema o sospecha debes acudir a tu especialista.